domingo, 8 de mayo de 2011

Capitulo 8

DF
El despertador negro reluciente con números verdes brillantes marcando la hora se activo despertando de este modo a Dominique. El se encontraba sobre su cama boca abajo, las sabanas no le cubrían su espalda desnuda porque la mitad de ellas se encontraban regadas por el suelo junto a miles de prendas sucias y tiradas. Se levanto lentamente y miro a su alrededor, se encontraba en su habitación donde no se podía encontrar nada de lo desordenada que estaba, luego camino hacia el baño y sin importarle cerrar la puerta se quito el pantalón de su pijama y se dio una ducha cuando termino se cubrió con una toalla y se dirigió a la cocina para comer algo rápido, se sirvió un poco de cereal y una tajada de pan y se recostó en el sofá de su sala y prendió el televisor, estaban dando noticias sin importancia pero justo cuando iba a cambiar de canal escucho algo que lo sorprendió mucho.
- … Cinco unidades han llegado a la escena, los testigos no están seguros de que ocurrió en realidad, solo dicen que escucharon extraños ruidos sobre sus cabezas y que luego todo exploto.- Detrás de la periodista mostraban imágenes de un centro comercial donde todo se encontraba hecho trizas y donde bomberos junto con los policías buscaban personas dentro del accidente.- Aquí tenemos al oficial al mando.- Dijo ella acercándose con la cámara corriendo hacia un hombre de traje azul.- Señor, ¿Puede decirnos que ocurrió aquí?.- El oficial con gesto serio se acerco a ella y le respondió.- No estamos muy seguros, pero hacemos todo lo posible para que este caso no se nos salga de las manos, no queremos que llegue a mayores. Creemos que fue un ataque terrorista pero la mitad de los testigos dan sus opiniones dependiendo de sus creencias, muchos ya han mencionado a Dios. De esta manera es muy difícil trabajar.- El policía se marcho y la mujer se aproximo de nuevo a la cámara a hablar.- Eso es todo por ahora, desde el centro comercial Prince, Andrea Rodríguez con mas noticias.- La señora sonrió y pasaron a otras noticias, Dominique no podía creerlo, nunca pensó que un demonio llegaría tan lejos como para contactarse con los humanos, giro su cabeza y vio la hora.
- No puede ser, llegare tarde.- Dejo los platos tirados en la cocina y corrió a su habitación vistiéndose con lo que encontraba. Se puso un pantalón completamente negro con una camisa blanca, cogió su maleta del estudio y apagando el televisor salió corriendo lo más que pudo hacia el instituto.
Salió de su apartamento y entro por las calles oscuras donde se encontró con Raquell, ella lo saludo con una mano y se acerco a él.
- Hola Dominique, se ve que vas apurado.- El le sonrió y se sentó contra una pared sucia.
- No tanto, ven siéntate, traje lo que te prometí.- Raquell feliz corrió hacia él y se sentó a su lado con sus manos al frente de ella listas para recibir su comida. Dominique de su morral saco unas tostadas francesas recién ellas, todavía se encontraban calientes, se las entrego todas a ella y Raquell sin aguantar mucho rato se las metió a la boca, se encontraba muy hambrienta.
- ¿Por qué será que eres tan bueno conmigo Dominique? Te lo agradezco, te debo mi vida, y esto esta delicioso.- Dijo ella sin quitarle los ojos de encima a su comida.
- Solo hago lo correcto, además yo sé que lo necesitas.- El sonrió de nuevo y empezó a levantarse.
- Eres una buena persona chico, ojala que no te corrompan.- Dijo ella viendo como él se preparaba para irse.
- Me tengo que ir Raquell nos vemos otro día.- Ella sonrió, se despidió con un gesto y se perdió en la oscuridad de los callejones, el también se alejo, corriendo de nuevo para que no llegara tarde a clase.

Mary abrió las puertas del salón de investigación y se sentó donde su grupo de amigas se encontraba, esta era la única clase que estaban todas juntas, Mary estaba vestida con un jean claro, unos pisa huevos negros y una camiseta azul casi pegada, llevaba su cabello oscuro recogido en una cola de caballo pero lo tenía tan largo que le caía por el hombro hacia adelante.
- Hola.- Dijo ella dirigiéndose a todas que estaban hablando de la salida del centro comercial. Todas la saludaron y le mostraron un lugar que habían apartado para ella, Mary se sentó en el lugar y en ese instante entro el profesor.
- Bueno, empezaremos clases en este momento así que hagan silencio.
El profesor hablo y hablo durante mucho tiempo, el cual se le hizo eterno a Mary y al final cuando sonó el timbre marcando el final de la clase ella no puedo esperar por salir de allí, recogió rápido sus cosas y se alejo de el lugar para acercarse a la cafetería donde estaba el señor Gorgori tan feliz como siempre.
- Gorgori- Pronuncio ella sonriendo.- Necesitaba verte.
- Mi querida niña, ¿Cómo estás?- Mary lo abrazo, le tenía mucho cariño porque se conocían desde que ella era muy pequeña.
- Muy bien, tengo un poco de hambre.- Gorgori sonrió con sus manos apoyadas en la cintura.
- Tenemos pan fresco, pero si prefieres acabo de hacer unos deliciosos pastelillos y un postre delicioso.
- ¿Postre? No sabía que ya habías perfeccionado el arte de lo dulce.- Dijo ella y los dos se rieron sincronizada mente.
- Claro que sí, yo soy excelente en todo lo que hago. Hoy hice ¡CHEESSE CAKE! En mi opinión esta delicioso.
- Entonces regálame un poco de ese cheesse cake y una limonada, estoy sedienta.
Gorgori le dio lo que pedía y ella se fue a sentar en una de las tantas mesas vacías que habían en el lugar, suspiro, le encantaba ese lugar, tan pacifico, tan tranquilo. Empezó a comer y con una seña le mostro su aprobación a Gorgori, en verdad estaba delicioso.
Mary se quedo un momento mirando la ventana que daba vista al campus, se sentía diferente, por alguna razón sentía que algo no andaba bien.
- Hola Mary.- Dijo una voz a sus espaldas sorprendiéndola, ella se sentó bien y despertó.
- ¡Hey! Hoy Dominique, ¿Cómo vas?- El se sentó a su lado, en una mano llevaba un pastelillo de los que había hecho Gorgori y en la otra llevaba su mochila lista para descargarla en el suelo.
- Muy bien Mary, lo que tienes hay pinta bueno.- Dijo el refiriéndose al postre, ella sonrió con un poco de tono rojo en sus mejillas.
- Sí, esta delicioso, y ¿Qué más me cuentas?- Pregunto ella dejando a un lado su comida.
- Nada, ya sabes, todo normal con las clases y en la casa.- Con un gesto desinteresado volteo a ver hacia la ventana, Mary se quedo viéndolo y de un momento a otro sin ninguna razón su corazón empezó a palpitar con más potencia, mas rápido y fuerte. Sintió sus latidos en su cabeza y noto como la sangre se le venía al cerebro haciéndole tornar las mejillas a un tono carmesí, notando el calor miro hacia abajo ocultándose tras su cabello que se lo había soltado hace pocos instantes, se paso su mano derecha por las mejillas y las sintió cálidas, sí, no cabía duda, estaba sonrojada. Intento calmarse pero no pudo y pensó en el porqué de su situación y a su mente regreso la imagen de la perfecta cara de Dominique la cual hizo que ella sonriera bobamente y se sonrojara mas.
- Cálmate Mary, deja de comportarte como una tonta.- Dominique volteo a ver sorprendido y un poco confundido.
- ¿Dijiste algo? Qué pena, no estaba escuchando.- Dijo el sonriendo, mostrando su dentadura perfecta.
- No, no.- Exclamo rápidamente tratando de que el no notara su situación.- No dije nada, solo estaba hablando yo sola.- Él se rio y movió su cabeza haciendo que sus mechones de cabello corto se movieran desordenadamente.
- Eres una persona muy rara, ¿Por qué hablas contigo misma si aquí estoy yo?
- Fácil, porque hay cosas que no debes saber.- Sonrió mostrándose un poco indescifrable.
- ¿Sobre tu vida?
- Sobre mis sentimientos.- En ese momento Mary noto que lo había cagado (que pena por la palabra tan grosera pero ese es el termino que buscaba) y también lo noto Dominique, se quedaron viéndose durante un tiempo sin decir nada, Dominique por todo lo que suponían las palabras de ellas se sonrojo y ella también hizo lo mismo pero por la pena y los nervios, voltearon su vista hacia puntos distintos, no sabían que decir al respecto, la conversación estaba totalmente muerta. Dominique tratando de salvar la conversación se aclaro sonoramente la garganta y emitió un largo eeeemmm…
- Bueno, hoy no tengo muchas cosas que hacer, ¿Y tú?- Ella mentalmente le agradeció por hacer eso, amaba que fuera tan abierto y sociable y otras cosas que implicaba eso.
- No, no, para nada, ya hice todos mis deberes.- Sonrió refiriéndose a las tareas y el aseo de la casa, siempre tenía que mantener la casa arreglada mientras que su madre estaba fuera, no solo porque ella se molestaba si no porque a Mary le daba asco el desorden, simplemente no podía con el.
- Me preguntaba si querías venir esta tarde, después de clases claro, a mi apartamento, la pasaremos bien, van a dar un documental de la segunda guerra mundial y nos podría servir para el nuevo tema en la clase de literatura.- Mary no sabía si aceptar o no, la verdad es que se podrían hacer más cosas en la casa de un hombre súper guapo, además si el hombre vive solo, que solo ver un documental. Ella sonrió.
- Claro, me encantaría, entonces nos vemos cuando toque la campana en la entrada, ¿Te parece?
- Sí, claro que sí.
El timbre sonó marcando el fin del receso y los dos se levantaron y se dirigieron hacia sus clases correspondientes.

1 comentario:

  1. Que bueno que ya estas mejor de salud!! yo tambien estaba enferma jejeje pero de examenes! pero en fin :) el capitulo estuvo bueno, que pasara en el proximo!!!!! en el apartamente de Domi!! publica pronto!!

    ResponderEliminar